La Ley de la Atracción.

Mateo 21:21 "Jesús les respondió: En verdad les digo que si tienen fe y no dudan, no solo harán lo de la higuera, sino que aun si dicen a este monte: Quítate y échate al mar, así sucederá"

Aunque muchos creyentes pretenden respaldar la ley de la atracción con versos bíblicos, ésta no es otra cosa que un "sincretismo religioso" que nació en el hinduismo y apoya sus afirmaciones en el karma o el poder de la mente para dominar. 

Lo verdadero y autentico para los hijos de Dios debe ser "la fe que mueve montañas", que quizás se le semeja pero no es lo mismo.

Dice Lucas 17:6 Entonces el Señor dijo: Si tuvieran fe como un grano de mostaza, dirías a este gran árbol: desarraigate y plántate en el mar. Y les obedecería.

A lo que llaman "Ley de atracción" o "Sistema de la llave maestra": es la idea o supuesto de que los pensamientos conscientes o inconscientes influyen sobre la vida de las personas, argumentando que son unidades energéticas que devuelven a la persona una onda similar. 

Si bien es cierto que Jesucristo llamaba las cosas que no son como si fuesen, esto de lo que se trata es de "autoridad espiritual y fe", no del uso del poder mental.

La biblia establece en Romanos 12:2 No vivan según los criterios de este tiempo; al contrario, cambien su manera de pensar para que cambie su manera de vivir y lleguen a conocer la voluntad de Dios, es decir: lo que es bueno, lo que es grato y lo que es perfecto.

Este verso de Romanos se trata de una invitación a renovar la mente y pensar en lo que proviene de la fe en Cristo y del conocimiento de la voluntad del Padre; Para que no seamos como aquellos que colocan su mirada solo en lo material y en ellos mismo como entes poderosos e independientes.

Tengamos cuidado con lo que profesamos que se parezca a la fe pero su trasfondo sea un mensaje torcido de la Palabra de Dios, porque la linea es muy delgada para pasar de uno a otro y puede dar cabida a un "espíritu de error" que termine extraviandonos de las Verdades Divinas.

La mentira a veces cabalga sobre los lomos de la verdad. Escudriñemos Las Escrituras y pongamos toda nuestra fe en Dios. 

A fin de cuentas: Todo es en El, por El y para El.