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lunes, 25 de mayo de 2015


Acorralado.


Job 3:23 "¿Por que dar luz al hombre cuyo camino está escondido, y a quien Dios ha acorralado?"

Job había tenido cuidado de no adorar sus posesiones por encima de Dios, y en ese momento se quejaba de las pruebas que le habían llegado a pesar de su vida recta. 
Abrumado por tanta calamidad comenzó por un momento a perder la perspectiva, porque todos los principios bajo los cuales había vivido estaban desmoronándose y se sintió "Acorralado"... Pero en medio de todo, Job sabía a sus adentros que el amor de Dios no puede ser medido o limitado por las crisis que vivía.
Dice Romanos 8:38,39 Estoy convencido de que nada podrá separarnos del amor de Dios. Ni la muerte, ni la vida, ni los ángeles, ni los poderes y fuerzas espirituales, ni lo presente, ni lo futuro, ni lo mas alto, ni lo mas profundo, ni ninguna de las cosas creadas por Dios. ¡Nada podrá separarnos del amor de Dios que es en Cristo Jesús!
¿Te has sentido alguna vez arrinconado en un lugar estrecho y limitado que impide tu salida? Pues a todos nos ha pasado- Pero la salida siempre estará en rendirse a Dios y no a las circunstancias.
A veces sentimos que nos acorralan los problemas, pero en oportunidades es el mismo Señor quien nos cerca para que podamos verlo desde otra dimensión y dejemos de mirar las cosas solo según nuestra lógica y enmarcar a Cristo en conceptos humanos y terrenales. Dios quiere que le conozcamos desde una nueva perspectiva aun más de cerca.
Todos nacimos para cumplir un propósito en la vida, y cuando andamos en despropósito, El nos acorrala para que reaccionemos y atendamos Su llamado de atención encarrilandonos en Su plan.
Dice Oseas 2:6 Por tanto, he aquí, cercaré su camino con espinos, y levantaré un muro contra ella para que no encuentre sus senderos.
En medio de ese cerco podemos: Aceptar o no el trato de Dios, tomar Su mano o quedarnos acomodados a este sistema en un falso lugar de seguridad; Nosotros escogemos porque de otra manera no hay modo de aprender la lección sea cual sea la situación. 
Necesitamos rendirnos ante el Padre para entrar a otro nivel; Y Después de todo podrás declarar con firmeza absoluta: Nada me podrá separar del amor de Dios. Acepta el desafío, supera las encrucijadas, pasa el Mar Rojo. Y veras como el Eterno obra de manera sobrenatural para darle la salida en victoria.

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