Lo Sabía, pero 

no lo Conocía.

Apocalipsis 1:1 "La revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; y lo dio a conocer enviándolo por medio de un ángel a su siervo Juan"

El apóstol Juan, quien había sido testigo presencial de la encarnación de Cristo, tuvo una revelación del mismo Cristo glorificado junto con acontecimientos que tendrían lugar en el futuro, para así conocerle a mayor profundidad, alentar y dar esperanza a los creyentes.

Algunos cristianos sabemos mucha biblia, estamos llenos de cantidad de conceptos y verdades aprendidas... Pero carecemos de "Revelación" de muchos de esos tesoros del Reino.

Dice 1 Corintios 2:10-12 Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios. Porque: ¿Quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que esta en el? Así tampoco nadie conoce las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios...

En oportunidades no disfrutamos de buena salud a pesar de confesar que somos sanos por las llagas de Cristo, porque no se nos ha revelado, no lo creemos en el fondo, no nos cuidamos como templo de Dios, las "verdades" de lo que Cristo llevó en la cruz para que vivamos sanos, libres y fuertes. De la misma manera ocurre con el diezmo, la mayordomía, nuestra identidad como hijos del Rey, la paternidad espiritual, etc... Si solo nos quedamos en conceptos y no nos abrimos al Espíritu pidiendo revelación, nos perdemos de disfrutar cada uno de los beneficios que ofrecen esas verdades Divinas.

Dice Romanos 1:20 Porque las cosas invisibles de El, Su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.

No te conformes con llenar tu intelecto de realidades celestiales, porque eso te hace un cristiano profesional pero no uno espiritual y en victoria. Necesitas anhelar las manifestaciones del Señor con Sus verdades profundas, para poder vivir la plenitud que El promete, y así reemplazar las creencias negativas, religiosas e insuficientes, por revelaciones llenas de vida y poder espiritual, de manera que renueves tu fe y se ilumine tu corazón para caminar en el nivel al que Dios te llama. 

Es momento de sumergirnos en el espíritu de Su palabra escudriñando el corazón del Eterno en oración, para poder degustar, digerir y desarrollarnos con mana del cielo y caminar bajo el poder sobrenatural como embajadores del Reino.

¡Pide revelación y recibirás tesoros nunca antes vistos!