Cuando Dios dice ¡Ahora!

Josue 1:2 "Mi siervo Moisés ha muerto; Ahora pues, levántate y pasa el Jordán tu y todo este pueblo, a la tierra que Yo les doy a los hijos de Israel"

Moisés acababa de morir, luego de 39 años de recibir las tablas de La Ley; Los israelitas tuvieron la oportunidad de entrar a la tierra prometida durante su peregrinar, pero escucharon mas las voces negativas y la religión, dejando de confiar que Dios les daría la victoria. Por lo tanto, el Señor no lespermitió entrar a Canaan, sino que los hizo vagar en el desierto hasta que muriera toda aquella generación desobediente.

Durante su caminar la nueva generación que surgió, decidió obedecer a Dios creyéndole y aprendiendo de cada una de Sus enseñanzas, a fin de poder entrar a la tierra que El prometió donde fluirá leche y miel.

El trabajo de Josue consistió en llevar mas de 2 millones de personas para una tierra extraña y conquistarla- Ese era el "tiempo aceptable" del Señor para esa gran bendición.

Dice 2 Corintios 6:2 En tiempo aceptable te he oído, y en día de salvación te he socorrido. He aquí ahora es el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación.

Cuando el Padre dice "Ahora" según Su cronología del tiempo: Es en ese momento, en el tiempo presente y actual. Ese tiempo debe ser recibido y obedecido y no despreciado; vivido con diligencia y no con negligencia; sin dejarlo escapar de nuestras manos porque el tiempo no se recupera, hay que redimirlo. 

Jesucristo es el único que te puede dar una palabra hoy para sanar tu pasado y liberar tu futuro. Y en Su Ahora, no es momento de escuchar voces negativas como paso con los 10 espías que solo vieron inconvenientes y gigantes transmitiendo sus miedos al resto del pueblo; sino que es tiempo de actuar con un espíritu diferente, correcto y diligente, como Josue y Caleb.

Dice Eclesiastes 3:15 Aquello que fue, ya es; y lo que será, ya fue; Y Dios buscará lo que paso.

A veces en nuestro Ahora de Dios, los gritos de afuera nos sabotean o aturden y el miedo nos arropa, y contra eso debemos luchar. Si es el Ahora de Dios en tu vida levántate, lucha, conquista, arrebata, decide y anda, pero no te quedes esperando que todo sea perfecto para poseer esa tierra que el Señor te ha prometido. 

¿Sabes que dijeron Josue y Caleb cuando entraron a reconocer la tierra y vieron gigante? ¡Eso es pan comido! Si es tu Ahora y es tuyo, hasta los gigantes y las langostas te terminarán sirviendo como ayuda en este nuevo comienzo que El Eterno ha preparado para ti. 

Así que tu eres quien decide, si seguir dando vueltas en el desierto o conquistar tu bendición.