La Espada Oxidada.

Efesios 6:17 "Tomen también el casco de la salvación, y la Espada del Espíritu que es la Palabra de Dios"

Orando por unas personas a las que Dios me mostró en visión la forma como hablaban; vi que su legua era como un cuchillo afilado con el que descuartizaban gente. En paralelo me mostró aquella visión de Juan en Apocalipsis, donde vio a Jesús y de Su boca salia una espada afilada que representaba Su Palabra.

El Señor me decía: La única arma ofensiva que les he entregado a Mi pueblo es "Mi Palabra", solo con ella pueden combatir las batallas que se les presenten en la vida. Pero en ellos, esa " Espada está oxidada" por el desuso... Ya ni siquiera tienen revelación de Mi Palabra por la condición interna en la que están, la han desplazado y dejado en un segundo termino.

Dice Apocalipsis 2:16 Por tanto, arrepiéntete, si no, vendré a ti pronto y pelearé contra ellos con la Espada de mi boca.

No digo que la Palabra de Dios pueda perder propiedad, porque indefectiblemente ella es vida. Lo que me mostró el Padre fue el lugar del olvido en que estaba en aquellas personas, porque: Sus criterios propios, la religión en la que están inmersos, el estar mas llenos de ellos que de Dios, su sabiduría terrenal, malicia, falta de temor al Señor y escasez de amor; habían suplantado esa arma tan poderosa por su justicia propia.

Dice Mateo 12:36 Mas yo les digo, que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio.

El Señor continuó hablando conmigo, y dándome Su consejo me dijo: Hija, cuando veas una situación que no entiendes, que te parezca injusta, te cause impotencia o quizás te sientas involucrada o afectada por ella directa o indirectamente, "Guarda silencio"... No actúes visceralmente haciendo juicio a priori, medita en Mi y en Mi Palabra, ven y pregúntame- Que ninguna maldición salga de tu boca. Recuerda que a nadie le he dado licencia para enviar muerte desde sus labios sino vida; hay algo que "Yo, el Maestro" te quiere enseñar. 

Es necesario que aprendas a controlar tu lengua, tus impulsos carnales, tus emociones negativas, y te actives en el uso de La Espada del Espíritu la cual es Mi Palabra, que te ejercites usándola correctamente. 

Si en verdad quieres ganar la batalla, "desarmate de ti y ármate de Mi". 

Solo con la Vida de Mi Palabra podrás: Avanzar, ejercer verdadera y legitima autoridad, conquistar y obtener grandes victorias.