Torre Fuerte.

Proverbios 18:10 "El nombre del Señor es Torre Fuerte; Los justos corren a El y quedan a salvo"

Este calificativo que denota tanta seguridad y protección, es uno de los nombres de nuestro Dios.

En la antigüedad, las ciudades se cercaban para protegerlas de sus enemigos con grandes murallas de piedra, y junto a ellas altas torres fortificadas. Una torre amplia como muralla de la ciudad y otra alta como fortín, para observar cuando se aproximaba el ejercito enemigo y usar las armas en su contra con mayor alcance y exactitud.

Esta naturaleza del Padre, nos muestra parte de Su carácter y esencia, como nuestra mayor seguridad y pronto auxilio. Al observar este nombre, podemos conocer aun más al Dios en quien confiamos y en el que podemos descansar, para no andar con temor o paranoicos en medio de tanta inseguridad que rodea este mundo.

Dice Salmos 61:3 Porque tu has sido refugio para mi, Torre Fuerte frente al enemigo.

Debemos comenzar por creer verdaderamente en el Señor como ese refugio impenetrable y fortín en medio de la guerra perenne de la vida; De nada vale repetirlo y no creerlo.

Nadie que tiene a un Dios como su "Torre Fuerte", debe sentirse atemorizado, vulnerable o desprotegido en medio de ningún ataque, sea físico o espiritual; Porque tienen en quien refugiarse para hallar protección y seguridad Divina, siempre.

Si bien es cierto, que en estos tiempos se ha multiplicado la maldad y por ende la inseguridad; Los hijos del Señor debemos conseguir en El, la seguridad y la paz que muchos no consiguen, para vivir confiados como león.

Dice Proverbios 29:25 El temor al hombre es un lazo; Pero el que confía en el Señor estará seguro.

Nuestro Padre es Torre Fuerte: frente a la muerte, la enfermedad, la escasez, el abandono, la maldad y a todo ataque diverso- ¡Corramos a El y seremos levantados!.

Correr a Sus brazos es como correr a un lugar alto, sublime, seguro, inexpugnable, impenetrable, donde el enemigo no logrará dañarnos; Pero hay que tratar de acudir antes, para ver de lejos y no recibir el mal. 

Así que corre a El antes de recibir el daño, permanece en Su fortaleza; Y experimentarás el descanso, protección y salvación que emana de ese magnifico lugar- Ven a El, que te espera Tu fiel amigo y guardador.