Fe mas fe.

Marcos 9:24 "Al instante el padre del muchacho gritó y dijo: ¡Yo creo, pero ayúdame a creer más!"

Hay situaciones en la vida en las que se necesita una "dosis doble de fe".

Este verso fue producto del grito de angustia de un padre, que en medio de una turba, gritó por ayuda al Maestro; A causa de su hijo, enajenado por el maligno.

Los discípulos trataron de ministrarle liberación al chico, pero nada ocurrió. Fue entonces cuando Jesús replicó: "Todo es posible para el que cree".

Lo tácito en esta liberación, fue que el primer espíritu que echó fuera el Señor, tanto de Sus discípulos como del padre del muchacho, fue el de "incredulidad".

Dice Mateo 17:20 Jesús les dijo: Porque ustedes tienen muy poca fe, aunque solo fuera del tamaño de una semilla de mostaza, le dirían a este cerro: Quítate de aquí y vete a otro lugar, y el cerro se quitara. Nada les sería imposible.

Jesús no condena a los discípulos por su falta de fe, sino que les muestra que necesitan más de la que tenían. Debían dejar de mirar el gran cerro y poner la mirada en Cristo.

A veces no entendemos cosas por lo que pedimos a Dios que nos explique, y Su respuesta es: Añade una dosis mayor de fe. Porque aunque es el poder del Señor lo que mueve la montaña, la fe nuestra debe estar presente para mover la mano del Eterno. 

Por lo tanto, cuando tambalea nuestra esperanza, debemos examinar nuestra fe y asegurarnos de que no estamos confiando en nuestra propia capacidad sino en la de Dios.

Dice Lucas 17:5 Los apóstoles dijeron al Señor: ¡Auméntanos la fe!

A mayor oración y acercamiento al Padre, mayor fe. 

Esa pequeña dosis de fe se va desarrollando en la medida de los retos que se nos ponen por delante y nuestra dependencia de Jesús.

Fe es el lenguaje del cielo un Principio del Reino para ganar a diario las batallas. Podemos orar bonito, hacer magníficas declaraciones de la Palabra de Dios y decir que creemos de la boca para fuera...pero si todo eso no va cargado de esa fe que remueve el mundo espiritual y repercute en el físico; de nada nos sirve. Hay situaciones que están esperando solo por nuestra fe para suceder. 

Si unimos nuestra fe a la de nuestro hermano, esta aumenta y cosas grandes sucederán. 

Pero alimentemos esa fe y pidámosle al Padre que no las aumente; Esa es la única manera de agradarle y vencer los obstáculos por grandes que parezcan.