Cultura del Reino.

Marcos 7:13 "Invalidando así la Palabra de Dios por la tradición de ustedes, la cual han trasmitido, y hacen muchas cosas semejantes a estas"

Una de las grandes luchas de la fe, son la influencias de las culturas y tradiciones humanas; A veces somos tan fieles a ellas que tratamos de acomodarlas a los Principios del Reino para no soltarlas. Dice Mateo 7:9 Astutamente violas el mandamiento de Dios para guardar tu tradición.

La Salvación es un evento instantáneo, pero la conversión es un proceso gradual mediante el cual vamos descubriendo Verdades Divinas que nos confrontan y llevan a ceder en esas áreas entregadas anteriormente a : tradiciones, fetichismo, superstición, culturas familiares o terrenales contrarias a la Palabra de Dios, idolatría, carácter, etc. 

Madurar dentro del Reino es un proceso que requiere "cambios voluntarios"; Es ese tiempo en que dejas de dar escusas por tus fallas y mediocridades y buscas soluciones a la luz de las Escrituras. Vivir y abrazar la Cultura del Reino de los Cielos es un requisito ineludible para los hijos de Dios; eso les hará creyentes eficaces, funcionales y les dará un entrenamiento antes de llegar al cielo. Para todo esto es necesario abandonar el sincretismo anterior y asumir las verdades absolutas planteadas en la Biblia.

El conocimiento que adquirimos antes de conocer a Cristo se originó en el árbol del conocimiento del bien y del mal del cual comieron Adán y Eva en desobediencia al Creador- Por lo tanto "no" servirá para manejarnos dentro del Reino, ya que para adoptar el conocimiento que proviene del Reino es necesario ir al árbol de la vida (Dios mismo).

Hay que abandonar la vieja manera de pensar, cambiando la fuente que inspira nuestros pensamientos; Y eso se logra conociendo La Palabra y a quien la inspiró.

Debemos manifestar el poder liberador de la Palabra revelada bajo el poder del Espíritu Santo, viviéndola y hablándola. Manifestar la Cultura del Reino por medio del poder del Espíritu con total libertad y que el mensajero pueda llevar un mensaje limpio y digno respaldado por un testimonio de persona regenerada y verdaderamente libre. 

Somos hijos del Rey de Reyes, somos ciudadanos del Reino de Los Cielos, entonces vamos a vivir como tal...¡Manos a la obra!